No hay duda de que una de las cosas más hermosas que uno puede vivir es estar con la persona que ama y tener juntos un hogar y una vida. Es por eso que aquí en Estados Unidos la residencia por matrimonio es algo tan solicitado. ¿Cómo podemos demostrar que nuestro matrimonio y nuestra relación es legítima? Vamos a verlo en este artículo.
Como sabemos, a Estados Unidos vienen muchísimas personas de todo el mundo en busca de oportunidades, y hay muchas que desean venir. Es por eso que el gobierno ha implementado medidas estrictas para regular que las personas que entren lo hagan con autorización.
Cuando hablamos de las residencias por matrimonio, es muy importante que la relación sea de buena fe y no por un beneficio migratorio. De lo contrario, la residencia podría ser negada.
Lo que debemos entender es que la evidencia que necesitamos mostrar va más allá de documentos y trámites legales. Lo que piden es prácticamente que uno revele ciertos aspectos de su vida personal y en pareja. Por ejemplo, fotografías en las que se pueda ver que han tenido muchas experiencias juntos, como viajes, reuniones familiares, etc.
En términos de dinero, entre más finanzas compartan tú y tu pareja será mucho mejor para que ellos vean que la relación es real. Por ejemplo, si tienen cuentas bancarias conjuntas, o propiedades a nombre de ambos. Todo lo que sirva para hacer ver a las autoridades migratorias que están diciendo la verdad.
Lo más común es que las parejas casadas vivan juntas, y eso es lo que esperan las autoridades migratorias. Sin embargo, si tú y tu pareja no residen juntos, esto no necesariamente significa que su proceso va a fracasar. Lo que debe hacerse en un caso así es justificar apropiadamente que esto sea así.
NOTA: tú y tu pareja tendrán que presentar una entrevista en la que les harán preguntas sobre su relación. Si alguno de los dos reside en el extranjero, esa persona tendrá que presentarla en el consulado de su país, sin la otra persona. Si ambos están en los Estados Unidos, la presentarán juntos. Lo más importante es estar muy tranquilos, y contestar las preguntas sinceramente.
Recuerda que este artículo es informativo, y que si tienes dudas sobre tu caso, lo mejor es que te asesores con tu abogado de inmigración de confianza.
¿Te gustaría que te ayude? puedes contactarme al 702-829-5290 para que examinemos tu caso y puedas tomar la mejor decisión. ¡Estoy aquí para ayudarte!
