Las razones por las que un inmigrante como nosotros abandona su país pueden ser muy variadas. A veces, puede deberse a que vivamos algo tan difícil que no quede más opción que salir en busca de mejores oportunidades.
Es por eso que muchas personas llegan a los Estados Unidos con la esperanza de poder quedarse a través del asilo.
Sin embargo, los casos de asilo son de los más complejos que podemos encontrar cuando hablamos de inmigrar a los Estados Unidos. ¿Qué pasaría si aplicamos para asilo y es negado? Vamos a verlo en este artículo.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que, si estás considerando en aplicar para el asilo, debes cumplir una condición fundamental: ser perseguido en tu país por motivos como raza, religión, ideas políticas y orientación sexual.
Una vez que hagas tu aplicación, el juez determinará si debe ser aprobada o negada. En caso de ser negada, tendrás 30 días para apelar.
No es necesario que hagas un proceso de asilo de nuevo. No olvides que es muy importante contar con la asesoría de tu abogado/a de inmigración durante todo el proceso para que puedan determinar juntos cuál es la mejor manera de proceder en tu caso específico.
Durante el período de apelación podrás permanecer en los Estados Unidos. Son 30 días naturales, es decir, se cuentan también los días de fin de semana y feriados.
Por otra parte, si tu aplicación es aprobada, podrás trabajar y residir en los Estados Unidos de manera legal. Además, pasado un año podrías aplicar para la residencia permanente, y pasados 4 años a la ciudadanía.
Para la aplicación de asilo, igual que con cualquier trámite migratorio, la recomendación es que te pongas en contacto con tu abogado de inmigración de confianza para que te dé el consejo más pertinente de acuerdo con tu situación.
No olvides que este artículo tiene un fin informativo y no debes tomarlo como una asesoría legal. Si te gustaría que echáramos un vistazo a tu caso, puedes llamarme al 702-829-5290. Estoy aquí para ayudarte.